Torreznos de churrasco de cordero con setas y ajoarriero
105 min.
2 personas
Fácil
Cordero
Ingredientes
Para los torreznos:
- 300 g de churrasco de cordero
- 1 brizna de romero
- 1 diente de ajo
- 500 ml de aceite suave
- 2 g de sal
- 50 g de boletus
- 2 ajetes tiernos
- brotes tiernos
- 10 ml de salsa de carne
Para el ajoarriero:
- 25 g de cebolla
- 10 g de pimiento verde
- 10 g de pimiento piquillo
- ½ diente de ajo
- 50 g de tomate maduro
- 25 g de cebolleta
- 5 ml de AOVE
Paso a paso
1. Confitamos el churrasco en una olla con aceite, ajo y romero a fuego muy suave, durante 1 h, hasta que se despegue el hueso.
2. Retiramos del aceite, y dejamos templar, retiramos los huesos, sazonamos con sal y enfriamos.
3. Cortamos en tiras de 2 cm por 4 cm
4. A los boletus le quitaremos con una puntilla la tierra mas afincada, y con un paño húmedo el resto, lo superficial
5. Los cortaremos en trozos no más grandes que el cordero. Cortamos los ajetes a lo largo, de 5 g y lo cortaremos finitos.
6. Salteamos los boletus hasta que se doren sin amargar, agregamos los ajetes y rehogamos todo sin que se quemen, sazonamos y reservamos.
7. Salteamos los torreznos para que desgrasen y queden crujientes.
8. De base ponemos el ajoarriero, encima los boletus y para culminar los torreznos. Salseamos alrededor para no reblandecer el torrezno, decoramos y damos frescura con brotes tiernos.
Para el ajoarriero:
1. Comenzamos por el primer grupo de ingredientes. La cebolla cortadita se pocha con la mitad del aceite y una pizca de sal, hasta que quede transparente.
2. Despepitamos ambos pimientos y los cortamos en daditos pequeños, incorporamos los mismos, primero el verde para que se cocine y luego el piquillo, cocinamos hasta secar lo máximo posible.
3. Vamos con el segundo grupo. La cebolleta la cortamos en brunoisse, la pochamos con el aceite y una pizca de sal, hasta que quede transparente, pelamos y despepitamos el tomate, lo cortamos en daditos de 5 mm y lo incorporamos a la cebolleta y cocinamos hasta que pierda sus aguas.
4. Mezclamos todo y ponemos a punto de sal. Agregamos el ajo laminado sin germen que doraremos con la mitad del aceite restante, para que huela a ajo.